Los tres son habituales en las convocatorias de Gerardo Martino, pero por primera vez compartirán el medio campo desde el comienzo de un partido. La línea de los volantes del seleccionado es una de las castigadas por las lesiones. Entre algodones está Javier Pastore, con una sobrecarga en el sóleo izquierdo. No fue tenido en cuenta para que esta noche sea titular y se verá su evolución para enfrentar el próximo martes a Colombia.
Lucas Biglia, Javier Mascherano y Ever Banega ocuparán esa zona neurálgica de los esquemas de Martino, que pretende que los volantes manejen el ritmo del partido, le den identidad al estilo de juego frente a Brasil.
Biglia reaparecerá tras la lesión muscular que sufrió frente a Ecuador y lo marginó de la formación de Asunción. Banega también es otro que deja atrás un inconveniente físico, que le impidió participar en la primera doble jornada.
La ubicación de Banega es una de las novedades. Normalmente fue un interior cercano a Mascherano, ocupó posiciones más retrasadas con respecto a Pastore. Esta noche se lo verá un poco más adelantado, en los sectores que suele moverse el cordobés de Paris Saint Germain.
Esa demarcación, más de enganche, es la que cumple en Sevilla y la que lo hace merecedor de muchos elogios en España. Una buena cuota de la creación del equipo andaluz pasa por los pies de Banega. Además, tiene llegada al área. En esta temporada hizo dos goles en seis partidos por la Liga de España y uno en tres cotejos por la Liga de Campeones. Un poco más atrás, el ex Newell’s fue elegido el jugador más valioso de la final de la Liga Europa que Sevilla le ganó a Dnipro.
Esa faceta le está faltando al seleccionado: volantes con llegada, que pisen el área. Banega tiene buen pase, panorama y remate. A los 27 años, atraviesa por una etapa de madurez futbolística y personal, luego de algunos episodios fuera de las canchas que pusieron en duda su continuidad en España.
Inclusive, cuando en Valencia quedó relegado, optó por venir a su querido Newell’s en la temporada 2013/14 con la intención de no perder opciones de integrar el plantel que Alejandro Sabella llevó al Mundial. La apuesta tampoco le salió bien porque el director técnico lo dejó afuera en el último corte, en una decisión que entristeció a sus amigos rosarinos: Messi, Di María y Lavezzi.
Su recorrido en el seleccionado también fue sinuoso: no logró consolidarse con Batista (lo puso de titular en el comienzo de la Copa América 2011) ni con Sabella ni con Martino, que lo tiene como una pieza de recambio de Biglia y Pastore.
Su vuelta a España tras la experiencia en Newell’s le permitió relanzar su carrera. Por su productividad, en Sevilla consideran una bicoca los 2,5 millones de euros que pagaron por su pase. Desconfiados de que pudiera asentarse, le hicieron un contrato de solo dos años, y ahora tienen premura en renovarlo para no perderlo.
El técnico Unai Emery está muy satisfecho con su rendimiento de mediocentro adelantado, respaldado por dos volantes más combativos como Iborra y Krychowiak. El único reparo es que suelen reemplazarlo en el final de algunos partidos, cuando su respuesta física decrece. La prensa deportiva también lo destaca. Recientemente, el diario Marca dijo sobre Banega: «Éver llegó de puntillas y se ha convertido en el auténtico referente sevillista».
Ausente en las dos primeras fechas por un esguince en la rodilla derecha, hoy Banega será el vértice creativo de un triángulo que hace base con el quite de Mascherano y el equilibrio de Biglia.
El equipo. La Argentina formará esta noche, desde las 21, ante Brasil con Sergio Romero; Facundo Roncaglia, Nicolás Otamendi, Ramiro Funes Mori y Marcos Rojo; Lucas Biglia, Javier Mascherano y Ever Banega; Angel Di María, Gonzalo Higuain y Ezequiel Lavezzi.