Un grupo de aproximadamente 120 personas de General Pico e Intendente Alvear vivió una amarga experiencia al viajar a Buenos Aires para presenciar el último partido de la Selección Argentina. A pesar de haber abonado un paquete completo, la gran mayoría se quedó en la puerta del estadio sin sus tickets, que nunca fueron entregados por el proveedor. La filial organizadora se comprometió a devolver la totalidad del dinero.
Lo que prometía ser una jornada inolvidable para ver a Lionel Messi y la «Scaloneta» se transformó en una profunda desilusión para un centenar de pampeanos. Organizado por la Filial «Ariel Ortega», dos micros partieron desde General Pico con destino a la capital del país, con la esperanza de alentar a la Selección.
Cada pasajero invirtió una suma cercana a los 430.000 pesos. Este monto, que había sufrido un incremento desde los $360.000 iniciales debido a un supuesto cambio a una mejor ubicación en platea, cubría el viaje, el almuerzo, las bebidas y, por supuesto, la anhelada entrada. La recaudación total de la organización, según los testimonios, habría superado los 45 millones de pesos.
Sin embargo, al llegar a Buenos Aires, el plan se desmoronó. De las 120 entradas que debían ser entregadas, solo aparecieron entre 15 y 20, dejando a la inmensa mayoría de los hinchas afuera del estadio.
Según pudo saber este medio a través de una fuente vinculada a la filial, el problema se originó con el proveedor de los tickets. «Se llegó a Buenos Aires como en otros partidos, la entrada se entregaba allá y llegado el momento de entregarla, a pesar de que habían sido abonadas, no las pusieron a disposición», explicó la fuente en estricta reserva.
La principal hipótesis que manejan es que las entradas fueron desviadas al canal de reventa, un mercado ilegal que prolifera en este tipo de eventos de alta demanda.
Desde la filial, aunque visiblemente golpeados por la situación, asumieron la responsabilidad ante los damnificados y aseguraron que se reintegrará el dinero.
El proceso de devolución comenzó de inmediato. Aquellos que habían pagado por transferencia bancaria empezaron a recibir el reembolso el mismo día del incidente. Para quienes abonaron en efectivo, la promesa es devolver la totalidad del dinero una vez que los micros regresen a General Pico.
«A cada uno de los que no ingresaron se le va a devolver el total del dinero, sin importar que obviamente no le vamos a hacer pagar el viaje ni la comida. Lo que nos interesa es la gente que llevamos y que no sufra el perjuicio económico, más allá de la ilusión que ya se perdió», concluyó la fuente.
Mientras los pocos afortunados que lograron ingresar vivieron una fiesta, para el resto quedará el recuerdo de un viaje marcado por la impotencia y la desilusión de haberse quedado a las puertas de cumplir un sueño.
LA FILIAL EMITIÓ EL SIGUIENTE COMUNICADO:
